Ampliar la zona de aprendizaje para cuidar tu higiene personal y tu apariencia física

Tener amigos y familiares tóxicos puede influir negativamente en tu autoestima y hacer que te descuides. Estas personas pueden criticarte, juzgarte o burlarse de tu apariencia.

 

No enfrentar la incomodidad te impide probar nuevos productos o rutinas de cuidado personal. Si no sabés tomar riesgos, vas a evitar invertir en tu apariencia y a conformarte con lo que tenés.

 

No generar situaciones de control para ganar confianza te hace sentir vulnerable ante las críticas y te impide tomar decisiones sobre tu apariencia. Establecé límites claros y aprendé a comunicarte de manera asertiva.

 

No perder el miedo al fracaso te paraliza y te impide experimentar con diferentes estilos. Aceptá que no siempre vas a acertar, pero no te rindas en tu intento de mejorar tu apariencia.

 

Si no ampliás tu zona de confort, vas a seguir repitiendo los mismos errores y a no encontrar nuevas formas de cuidarte. Buscá información sobre higiene, nutrición y ejercicio, y probá diferentes estrategias.