Ampliar la zona de confort para reducir gastos innecesarios

Los traumas del pasado no resueltos pueden hacer que tengas una relación conflictiva con el dinero y que gastes de manera impulsiva para llenar un vacío emocional. Esto te impide controlar tus finanzas y te lleva a acumular deudas.

 

No reconocer tus debilidades te impide buscar ayuda para manejar tus finanzas. Para resolver esto, identificá cuáles son tus puntos débiles y buscá  un terapeuta que te guíe para llenar los vacíos emocionales que te conducen a acciones que te perjudican.

 

Si no determinás objetivos concretos, vas a gastar tu dinero sin un propósito claro y te va a ser difícil ahorrar. Definí qué querés lograr con tu dinero, ya sea comprar una casa, viajar o jubilarte anticipadamente. Investigá en la web sobre como determinar objetivos concretos para tus finanzas.

 

No aceptar tu realidad para mejorarla te lleva a negar tus problemas financieros y a no hacer nada para cambiarlos. Analizá tus ingresos y gastos, identificá dónde estás gastando de más y desarrollá un plan para reducir tus gastos.

 

Si no reconocés tus habilidades, vas a subestimar tu capacidad para generar ingresos y te vas a conformar con un trabajo que no te satisface. Hacé una lista de tus logros y habilidades, y utilizalos como base para buscar nuevas oportunidades laborales o emprender un negocio.

 

No ponerte desafíos te estanca y te impide crecer económicamente. Exponete gradualmente a situaciones que te generen ansiedad o miedo, como invertir en un negocio o pedir un aumento de sueldo. Investigá en la web sobre como ponerte desafíos para controlar tus finanzas.

También te podría gustar...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *