Cómo construir una autoestima sólida (III)
Tener amigos y familiares tóxicos puede minar tu confianza y hacerte sentir inseguro al momento de valorarte a vos mismo. Sus críticas y comentarios negativos pueden generar miedos y barreras que te impiden construir una autoestima sólida.
Si no enfrentás la incomodidad, vas a ceder a la presión de los demás y vas a adoptar una imagen de vos mismo que no se ajusta a tus valores y deseos. Para cambiar esto, salí de tu zona de confort, defendé tus ideas y rodeate de personas que te apoyen y te respeten. Una buena idea es unirte a un grupo o comunidad de personas que compartan tus valores y que te ayuden a crecer como persona.
Cuando no sabés tomar riesgos, el miedo al rechazo te paraliza y te impide expresar tus opiniones y tomar decisiones que se alejen de lo que los demás esperan de vos. Para cambiar esto, aceptá que no podés complacer a todos y que lo importante es ser fiel a vos mismo. Concentrate en tus valores y en tus deseos y no te dejes influenciar por la opinión de los demás.
No generar situaciones de control te hace sentir inseguro y te dificulta tomar decisiones con confianza. Para cambiar esto, buscá actividades que te permitan sentirte en control de tu tiempo y de tus decisiones, como planificar tu semana con anticipación, establecer límites claros con los demás o delegar tareas que no te aporten valor.
Si no perdés el miedo al fracaso, vas a evitar cualquier actividad que pueda poner en riesgo tu imagen o tu reputación. Para cambiar esto, aceptá que no tenés que ser perfecto y que lo importante es aprender de tus errores. No te compares con los demás y concentrate en tu propio camino.
Cuando no ampliás tu zona de confort, te limitás a las mismas personas y situaciones de siempre y te perdés la oportunidad de conocer nuevas perspectivas y de fortalecer tu autoestima.
