Cómo crear una conexión emocional antes del acercamiento físico (I)
La presión social te puede llevar a creer que el acercamiento físico es lo más importante, dejando de lado la conexión emocional. Esta idea te impide conectar de manera auténtica con los demás y te dificulta construir relaciones significativas.
Si no tenés una mentalidad de abundancia, vas a creer que las oportunidades de conectar emocionalmente son limitadas y que tenés que aprovechar cualquier oportunidad de acercamiento físico. Para cambiar esto, empezá a ver el mundo como un lugar lleno de personas interesantes y con las que podés conectar de manera genuina. Una buena idea es proponerte conocer a alguien nuevo cada semana.
Cuando no estás seguro de que vas a lograr tus objetivos, te aferrás a la idea de que el acercamiento físico es la única forma de conectar con alguien. Para cambiar esto, tené la certeza de que sos capaz de construir relaciones significativas basadas en la conexión emocional. Enfocate en tus fortalezas y en tu capacidad para conectar con los demás a un nivel más profundo.
La falta de afirmaciones positivas te hace sentir inseguro y te impide mostrar tu vulnerabilidad a los demás. Para cambiar esto, empezá a valorarte y a reconocer tus cualidades. Decite a vos mismo «Soy una persona interesante y valiosa, y puedo conectar con los demás a un nivel emocional». Un buen ejercicio es escribir cada día tres cosas que te gusten de vos y cómo podés usarlas para conectar con los demás.
Si no erradicás los pensamientos negativos, vas a interpretar cada señal de rechazo como una confirmación de tus inseguridades. Para cambiar esto, aprendé a identificar esos pensamientos y reemplazarlos por otros más positivos y constructivos. No te enfoques en lo que te falta, sino en lo que podés ofrecer.
Cuando no vencés tus miedos, el miedo al rechazo te paraliza y te impide acercarte a los demás de manera auténtica. Para cambiar esto, enfrentá tus miedos y mostrá tu vulnerabilidad, aunque te dé un poco de cosa. Recordá que no tenés que ser perfecto para conectar con alguien. Una buena idea es empezar compartiendo algo personal con alguien en quien confíes.
