Cómo desarrollar tu inteligencia emocional y empatía (II)
Los traumas del pasado no resueltos pueden hacer que te cierres a los demás y que tengas dificultades para entender sus emociones. Esto te impide construir relaciones significativas y te aísla del mundo que te rodea.
No reconocer tus debilidades te impide buscar ayuda para desarrollar tu inteligencia emocional.
Si no determinás objetivos concretos, tu desarrollo emocional será vago e ineficaz. Definí qué querés lograr con tu inteligencia emocional, ya sea mejorar tus relaciones, comunicarte de manera más efectiva o simplemente sentirte más conectado con vos mismo. Buscá en libros sobre cómo determinar objetivos concretos para el desarrollo personal.
No aceptar tu realidad para mejorarla te lleva a negar tus problemas y a no hacer nada para cambiar. Analizá tus experiencias pasadas, identificá qué cosas querés mejorar y desarrollá un plan para lograrlo.
Si no reconocés tus habilidades, vas a subestimar tu capacidad para conectar con los demás y te vas a conformar con una vida poco plena. Hacé una lista de tus logros y habilidades, y utilizalos como base para construir una mayor confianza en vos mismo.
No ponerte desafíos te estanca y te impide crecer como persona. Exponete gradualmente a situaciones que te generen ansiedad o miedo, y aprendé a manejarlas de manera efectiva. Buscá en libros sobre cómo ponerte desafíos para mejorar tu inteligencia emocional.
