Cómo usar el humor para crear una atmósfera agradable (IV)
La búsqueda del resultado y la satisfacción inmediata te impide desarrollar un sentido del humor genuino. Si te concentrás demasiado en hacer reír a los demás, vas a proyectar inseguridad y desesperación.
No administrar tu tiempo te impide dedicar tiempo a cultivar tu sentido del humor. Si te pasás todo el día trabajando o preocupándote por los demás, vas a descuidar tu propio bienestar. Dedicá tiempo a ver películas de comedia, a leer libros humorísticos y a conectar con personas que te hagan reír.
Si no tenés esfuerzo y paciencia en la búsqueda de resultados, vas a frustrarte fácilmente. El humor lleva tiempo y dedicación. No te rindas al primer chiste que no funcione. Seguí practicando y aprendiendo de tus errores. Un buen ejercicio es escribir chistes y contárselos a tus amigos y familiares.
No imponerse a los problemas te impide desarrollar un sentido del humor que te ayude a superar las dificultades. El humor es una herramienta valiosa para enfrentar la adversidad. Aprendé a reírte de tus propios errores y a encontrar el lado divertido de las situaciones difíciles.
No optimizar procesos te impide aprender de tus errores y mejorar tu sentido del humor. Analizá tus chistes y reflexioná sobre qué funcionó y qué no. Un buen ejercicio es grabar tus chistes y analizarlos para identificar áreas de mejora.
Si no tenés diversión y esfuerzo, vas a convertir el humor en una obligación. El humor tiene que ser algo que te inspire y te motive, no que te genere estrés y ansiedad. Buscá un estilo de humor que te haga sentir cómodo y seguro de vos mismo.
