Cómo dejar de ser malhumorado ampliando tu zona de confort
No reconocer tus propias emociones te mantiene malhumorado. Analizá qué te provoca mal humor y buscá soluciones. Un buen comienzo es llevar un diario de tus emociones y situaciones que las desencadenan.
La falta de objetivos claros te desmotiva y aumenta el mal humor. Establecé metas realistas y medibles, enfocándote en lo que te hace feliz. Un paso concreto es crear un plan de actividades que te brinden bienestar.
Negar tus emociones negativas te impide mejorar. Acepta tus sentimientos, sin juzgarte. Un consejo práctico es practicar la autocompasión y el autocuidado.
Ignorar tus fortalezas te impide contrarrestar el mal humor. Identifica tus puntos fuertes y utilízalos para mejorar tu estado de ánimo. Un ejercicio práctico es hacer una lista de tus habilidades y cómo podrías aplicarlas para mejorar tu bienestar.
Salí de tu rutina. Proponéte actividades nuevas que te saquen de la monotonía y te ayuden a cambiar tu perspectiva.
